jueves, 25 de diciembre de 2014

MANUSCRITICS


     Hoy traigo hasta este blog, que ya sabéis que no es literario, aunque lo parece, mi último descubrimiento en esta materia, en materia literaria, que no es otro que la plataforma "Manuscritics", una web de más o menos reciente creación, pues nació el pasado mes de julio, dedicada a escuchar, o mejor dicho leer, la opinión de lectores corrientes (aunque ellos nos definan como expertos) sobre manuscritos que todavía no han sido publicados pero que verán la luz pronto, o podrán verla, de manera que los editores puedan tener una opinión formada acerca de lo que piensan sobre esa obra potenciales lectores, y de cómo se podría mejorar o de corregir posibles errores. También es, según indica la propia plataforma, una forma de descubrir nuevo talento avalado por los lectores del día a día, por bibliotecarios, libreros, profesores, blogueros, miembros de clubes de lectura... que colaboran en un proceso con un término tan interesante como el de "inteligencia colectiva".

     La participación en esta plataforma se dice que es por invitación, normalmente si reúnes uno o varios de los perfiles de lector comentados anteriormente. En mi caso ha sido por mi relación con la editorial Libros.com a través de la que publiqué mediante crowdfunding mi primera novela "Cien días después. El polvorín de Peñaranda" y por mi perfil de bloguero y profesor. También están colaborando con Manuscritics los lectores de "Entreescritores", una plataforma de autopublicación de libros inéditos y, más recientemente, de "Lectyo", otra plataforma social de lectura, en esta ocasión creada por la Fundación Germán Sánchez Ruipérez, tan cercana para mí. Cada manuscrito puede ser leído por un máximo de cien lectores, que dispondrán de un tiempo determinado para redactar ese informe, esa opinión acerca de la obra (aunque también puede ser que la obra no te guste, la abandones y por tanto la información positiva extraída por Manuscritics, los editores o incluso el escritor sea precisamente esa, que has abandonado la lectura).

     Como lector tienes un perfil en el que vas a seleccionar que 3 tipos de géneros son de los que quieres leer manuscritos. En mi caso han sido los de novela histórica, negra y literaria, que supongo que es cando no se puede calificar a la obra de una manera más concreta... pero también existen otros como el thriller, fantástica, de humor, romántica, de relatos, viajes, deportes, ensayo... Como lector, además, te asignan un ranking en función de las obras leídas, de las comentadas, de si el libro por el que apostaste llegó a ser un éxito; y también puedes obtener una serie de beneficios (¡cómo si el propio hecho de leer ya no lo fuera!) como la posibilidad de obtener un ejemplar del libro firmado por el autor, participar en encuentros con escritores, invitaciones a festivales y ferias literarias y también algo en lo que están trabajando en Manuscritics y que todavía no sé bien en qué consiste, aunque más o menos lo imagino, llamado "Bono de libros". Como escritor "aficionado" en mi caso, se abre una nueva posibilidad.

     Para concluir, indicar que yo ya estoy terminando la lectura de un primer manuscrito titulado "La miel de los días" de Juan José Flores, de la que entiendo que aquí no debo todavía comentar nada, y que ya he tenido la suerte de ser agraciado con un ejemplar de un libro como premio por mi participación, "Fin de poema" de Juan Tallón, que espero recibir pronto. Por poner un pero a esta nueva aventura literaria es el desarrollo de la plataforma de lectura en sí, que en según que dispositivos funciona mejor que en otros, no siendo siempre fácil o lo más práctico su manejo, pero en fin, son cosas que se pueden comprender cuando se lleva poco tiempo "en el aire".

domingo, 14 de diciembre de 2014

LOS REPORTEROS DE NATIONAL GEOGRAPHIC



     El pasado año 2013, National Geography Society celebró nada más y nada menos que su 125º aniversario. Se trata sin duda de una de las sociedades para el conocimiento geográfico más importantes del mundo, sino la que más, y aunque esto lo hace desde diferentes medios o perspectivas, su magazine, su revista es a mi parecer su "producto" más carismático. En octubre de 1997 comenzó a publicarse la revista en español en colaboración con la editorial RBA y el que esto escribe no dudó ni un instante en ir a buscar ese primer ejemplar al kiosko, no en vano, por aquel entonces comenzaba el segundo curso de mi licenciatura en Geografía en la Universidad de Salamanca, siendo por tanto una escusa perfecta. Tan solo unos meses después, y muy satisfecho con el producto, decidí suscribirme a la misma, de forma que cada mes tendría el ejemplar en mi casa sin preocuparme de que se me olvidara. 17 años después, ¡qué barbaridad, como pasa el tiempo! sigo recibiendo sobre el 25 de cada mes mi ejemplar de National Geographic en español. Echando cuentas muy por encima, me sale nada más y nada menos que unos 200 ejemplares, dos centenares de la revista con el recuadro amarillo que tengo a buen recaudo para cuando un día tenga el sitio adecuado para tenerlas casi como de exposición. Pero conservarlas no es el gran premio, como os podréis imaginar, lo mejor de todo ha sido el propio hecho de haber leído todos y cada uno de los artículos, de los reportajes, de las noticias, de haber aprendido muchísimas cosas, de vivir múltiples aventuras gracias a los reporteros y fotógrafos de la Sociedad (aparte de colaborar con mi suscripción a los mismos).


Portada del primer número de National Geographic en español

     Son muchos los profesionales que han publicado a lo largo de estos, como digo, 17 años, sin embargo hay unos que por una razón u otra se han quedado más en mi memoria que otros, puede que por que hayan aparecido más, puede que porque me hayan llamado más la atención sus artículos o vete tú a saber por qué, el caso es que lo han hecho.

     Desde hace tiempo que tenía en mente escribir un post acerca de estos reporteros y fotógrafos, de esa serie de nombres que cada vez que publican me hacen recordar algunos de sus trabajos anteriores. Uno de los más carismáticos para mí es J. Michael Fay, biólogo y conservacionista que en octubre de 2000 nos acercó a través de la revista la primera parte de su "Megatransect", un viaje a pie de más de 2.000 kilómetros y un año de duración a través de los bosques tropicales del Congo, llegando hasta la costa de Gabón. Posteriormente tuvimos una segunda y tercera parte de esta formidable aventura, que además de acercarnos a nosotros esos parajes maravillosos, sirvió para que el presidente de Gabón se comprometiera a crear una red de 13 parques nacionales en el pequeño país africano, y por tanto ayudar a la protección de numerosas especies animales y vegetales. A Fay, le acompañaban entre otros Mike "Nick" Nichols, otro de mis nombres ilustres, que además de fotografiar la "Megatransect" le recuerdo por un fotomontaje muy especial, el de una secuoya gigante de 90,5 metros de altura en el Parque Estatal de Secuoyas de Prairie Creek en California (EE.UU.). Es absolutamente impresionante poder ver uno de estos gigantes centenarios de una sola vez.


Michael Fay encabezando la Megatransect

     Otro de los nombres que no se me olvidan es el de Carsten Peter, también fotógrafo. Peter ha realizado muchos trabajos y de diversa temática, pero sobre todo lo recuerdo por sus reportajes y fotografías acerca de volcanes. Buscando en la web de NGE he podido recordar el reportaje sobre un volcán tanzano llamado Doinyio Lengai en enero de 2003 y que la propia revista lo denominaba como el volcán más extraño de la tierra. Carsten volvió otra vez a África para hablarnos y fotografiar otro volván, el Nyiragongo, en la República Democrática del Congo y también lo hizo con uno más conocido y cercano, el Etna, en Sicilia, Italia. Pero además de volcanes, este fotógrafo-aventurero nos ha acercado hasta cuevas en Vietnam y cañones en Australia, entre otros. 


Carsten Peter delante de un volcán en erupción

     Los fondos oceánicos son otro clásico de la revista y por ahí me vienen varios nombres a la mente, como son los de Robert "Bob" Ballard, David Doubilet o el écologo marino español y desde hace algunos años explorador residente de la Sociedad Enric Sala. Ballard nos ha acercado con sus objetivos hasta importantísimos pecios, o sea barcos hundidos. Famoso es por ser el descubridor del Titánic, pero también del Yorkstown, uno de los portaaviones hundido en el Pacífico durante la famosa batalla de Midway entre Japón y EE.UU. en la Segunda Guerra Mundial, batalla que empezó a cambiar las tornas entre estos dos rivales, después del ataque de Pearl Harbor. David Doubilet, en cambio, nos ha acercado más al mundillo de los peces, mostrándonos algunos de los más curiosos ejemplares. En un sentido similar se mueve Enric Sala, embarcado en un proyecto denominado "Mares prístinos" y cuyo último trabajo para la revista ha sido acercarnos hasta un paraíso submarino en las islas Ésporadas Ecuatoriales del Sur.

     Otros nombres inolvidables son los de Steve McCurry, el famoso fotógrafo de la niña afgana en un campo de refugiados de Pakistán que fue portada de la revista en 1985 (entonces no se publicaba en español), lugar al que volvió 17 años después para tratar de localizarla y fotografiarla, consiguiéndolo. ¡Qué cambio tan radical en el aspecto de la que era una bella chiquilla con unos ojos verdes cautivadores!. Hace poco, otro nombre se convirtió en referente mío en la revista, esta vez, sin embargo por un motivo trágico, su fallecimiento en plena "misión". Se trata de Tim Samaras, un famoso cazador de tornados norteamericano, que nos acercó el mundo de la meteorología a través de estos monstruos cada vez más frecuentes. Él no fue el único que falleció aquel 3 de mayo del pasado año 2013 en tierras de Oklahoma, también lo hicieron sus dos compañeros del equipo "Twistex", uno de ellos, su hijo. Aquel tornado arrebataría la vida a otras 19 personas más.


La refugiada afgana que inmortalizó Steve McCurry

     El último gran nombre que he incluido a mi lista de "reporteros fetiches", por llamarlos de una manera especial, es el de Paul Salopek (habría todavía otros muchos nombres de los que poder hablar: Jodi Cobb, Tomasz Tomaszewski...). Salopek tiene publicados varios artículos en la revista desde hace tiempo (Sudán, Sierra Madre), sin embargo es con su último proyecto con el que se me ha quedado "en la retina", nada más y nada menos que un viaje a pie de 7 años de duración a través del mundo, denominado "Caminata más allá del Edén", que recrea, como dice la propia revista, la migración de los primeros humanos modernos que partieron de África para explorar el mundo. 4 continentes y 33.000 kilómetros son el objetivo, partiendo desde Etiopía (yacimiento de Herto Bouri) para llegar hasta Tierra de Fuego en la Patagonia argentina, pasando por Oriente Próximo, atravesando el resto del continente asiático, para desde Rusia entrar en Alaska y recorrer todo el continente americano bordeando el Pacífico. Por el momento son ya 3 los artículos que Salopek nos ha regalado, el último este mismo mes donde ha llegado a "Tierra Santa". 


Recorrido que realizará Paul Salopek

     Seguro que son muchos más los reporteros y fotógrafos de los que se podría hablar, con artículos y fotografías maravillosos, más si consideramos los ya casi 127 años de la revista y no solo los poco más de 17 desde que yo la leo. Siéntanse todos y todas homenajeados desde estas humildes líneas.  

jueves, 4 de diciembre de 2014

DICCIONARIO DEL DIABLO

     

     Rescato hoy otro ejercicio más de los 2 talleres de escritura en que participé (ya van quedando poquitos). La propuesta de aquel día era tratar de definir unos cuantos términos al estilo del "El diccionario del diablo", una obra de Ambrose Bierce, cargada de sátira e ironía, pero muchas veces con altas dosis de verdad. Antes de exponer mi definición de los términos propuestos (hombre, indiscreción, trabajo y virtudes), os dejo como definía Bierce algunos términos en su obra, comenzando por la propia definición de diccionario, que no era otra que "perverso artificio literario que paraliza el crecimiento de una lengua además de quitarle soltura y elasticidad. El presente diccionario, sin embargo, es una obra útil".

     Como vemos, modestia no le faltaba, pues después de criticarlo, alaba su propia obra. El diccionario cuenta con cientos de referencias. Algunas eran estas:

Amistad, s. Barco lo bastante grande como para llevar a dos con buen tiempo, pero a uno solo en caso de tormenta.

Baco, s. Cómoda deidad inventada por los antiguos como excusa para emborracharse.

Egoísta, adj. Persona de mal gusto, que se interesa más en sí mismo que en mí.

Epitafio, s. Inscripción que, en una tumba, demuestra que las virtudes adquiridas por la muerte tienen un efecto retroactivo.

Éxito, s. El único pecado imperdonable contra nuestros semejantes.

Fanático, adj. Dícese del que obstinada y ardorosamente sostiene una opinión que no es la nuestra.

     Aquí van mis propuestas, algunas de las cuales inspiradas en las anteriores:

Hombre, s. Animal que excepcionalmente suele ser racional. Consta de muchas piezas interiores, de las cuales, sin duda alguna, la mejor es la costilla.

Indiscreción, s. (1) Iceberg por el que en ocasiones el barco de la amistad zozobra. (2) Acción que se comete inmediatamente después de que alguien diga "te voy a contar un secreto pero no se lo digas a nadie".

Trabajo, s. Acción perniciosa para la salud por la que incluso te pagan.

Virtudes (Virtud), s. Propiedad que aporta la muerte con carácter retroactivo al hombre y que suele ser inscrita a modo de epitafio en su tumba.